A causa de la exhaustividad
o del azar
esa tarde inesperada
llegó el diagnóstico
de la enfermedad sistémica.
La pesquisa se inició
sin fe,
basada en la rutina
sin alarma,
por falta de estrógenos
sin piedad
densidad mineral ósea insuficiente
consignó lapidaria diagnosis
sin sospecha, ni signo ni síntoma observable,
La porosidad fue descripta por el sensor
en grado avanzado.
Patología.
Deterioro de la microarquitectura de sostén
fragilidad, fragilidad, fracturosidad.
Hueso traidor.
Deshiciste en silencio las retículas
medraron las destructoras osteoclastos
acelerando el necesario proceso y
exagerando la resorción.
Sin emitir sonido
un desmigamiento acechaba
al fémur proximal, húmero, vértebras
y antebrazo distal.
Preparando las fracturas de cadera
que van desde la cabeza del fémur
hasta el troncánter menor.
La estructura detonada
falta de sostén.
Aterra el propio cuerpo
y traiciona.
15 de mayo de 2022
Traidor
Etiquetas:
cuerpo,
diagnóstico,
erotismos,
huesos,
porosidad,
procesos creativos
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